Redescubriendo encuentros y convivencias

En este tiempo marcado por la información, el conocimiento y las nuevas tecnologías, las redes sociales parecen una revolución en todo sentido e incluso, una realidad capaz de forjar un mundo más comunicado y lleno de nuevos tipos de relaciones.

Sin embargo parece que todo no está tan claro.

Hace años se dice, de la mano de Levinas, que es clave que aprendamos que nada puede sustituir los encuentros reales entre personas. Cara a cara. Forjar un más sólido yo-tu en la línea de Buber.

Incluso el Papa Francisco ha dicho mucho acerca de la urgencia de redescubrir encuentros, abrazos, contactos.

En estos días me encontré con Brendan Myers. Un canadiense que, afín al neopaganismo y al neodruidismo, en sus obras se rebela contra el utilitarismo que sólo piensa el mal como el menor daño y considera sólo el valor de la reglas que facilitan la convivencia mínima en sociedad. Myers va más allá. Además de apostar por un clima moral más rico en sociedad, hace ver que hablar de carácter, identidad, autoconocimiento y convivencia son cuestiones que no pueden dejarse ni obviarse de modo alguno.Promotor de una ética de la virtud, deja claro que hasta para la salud resulta beneficioso un estilo de vida recto, en armonía con el medio y lleno de ricas relaciones.

Sería interesante vivir este ideal de encuentros reales y convivencias, ¿no creen?

En @EspacioAF se lee: "Brendan Myers nos recuerda algo que olvidamos a menudo: nuestras relaciones son de persona a persona. Esto implica que somos personas viéndose, oyéndose, tocándose y hablando unas a otras, y compartiendo cosas gracias a valores como la generosidad y la compasión".

Berardi y su futurabilidad

En estos días he tenido ocasión de leer algunas ideas del filósofo italiano Franco Berardi acerca de la presente realidad. Se trata de una entrevista que aparece en EL TIEMPO

Analiza allí este filósofo, qué ocurre en nuestro mundo marcado por la tecnología, cómo ello afecta el entramado social y qué queda decir de esta etapa de desarrollo del capitalismo.

Como ocurre con algunas pensadores de este tiempo, Berardi suena un poco pesimista en la entrevista que comentamos. El dice, sin embargo, que a futuro podría ocurrir una especie de rebelión de todos los que hoy construyen y aportan al mundo tecnológico y de la información y susciten así el ascenso de un nuevo sujeto constructor de una sociedad un poco diferente. Esta solidaridad del mundo de los forjadores de tecnología, información y conocimiento lo llama el "cognitariado".

Habla de una "era de la impotencia". Le preocupan ciertos cambios políticos, la violencia abundante en casi todo el mundo, los neonacionalismo supremacista, el envejecimiento de la población, las nuevas normas del mundo financiero, el impacto del tecnocapitalismo, la crisis del humanismo, etc. Igualmente, constata que hay una especie de depresión global que paraliza ante las consecuencias o resultado de lo acaecido en la modernidad tardía y que ha llevado al mundo al presente caos y deterioro.

En esa futuridad posible o futurabilidad de que habla, ubica a ese cognitariado actuando para romper brechas digitales y democratizar la tecnología y la información. Igualmente, como pasa con tantos pensadores de izquierdas, ve sólo en la derecha peligros. Triste miopía que la realidad desvela como parcial e incompleta visión de las cosas.

Forjar un humanismo nuevo y rescatar el pensamiento crítico son urgencias para este italiano

Sobre la filosofía dice: "qué es la filosofía lo han dicho muy bien Gilles Deleuze y Félix Guattari en su último libro: es la creación de conceptos que permiten capturar mentalmente el mundo, transformar el caos en algo comprensible y fundar la conciencia ética. Filosofía es la creación de puentes sobre el abismo del no ser, del sinsentido, el abismo del no existir de la verdad. La filosofía es la amistad del cerebro con el caos".

Seguimos con el tema de felicidad: Punset

Hace poco miraba una entrevista de hace un tiempo al recientemente fallecido divulgador científico, E. Punset.

Realmente agradable resulta ver y leer a este interesante y punzante científico.

Dedicó mucho de su reflexión a explicar cómo se puede llegar la felicidad, al gozo. A la plenitud.

Vi hace poco una entrevista en  Ethic.es a Punset sobre este tema y me parece que hay allí ideas de gran interés, sobre todo, práctico.

Punset llega a deci esto:

-si dormimos,
-tenemos amigos,
-somos solidarios y
-manejamos bien la ansiedad, la soledad y la tristeza (para aprender a manejar el miedo), iremos avanzando muy bien en la ruta hacia estar mejor. Sentirnos más plenos.

Igualmente, afirma que el sistema político y el entorno pueden afectar pero no herir el alma de quien aspira a ser feliz en su vida. El tema es dar a cada cosa su lugar y no tener miedo a cambiar de opinión sobre algunos temas de vez en cuando.

Dice que todo tiempo pasado fue peor. Puede ser eso que dice Punset. Tal vez no tan tajante se podría ser pero bueno, se debe mirar al futuro con optimismo a pesar de los pesares y estar a favor de lo bueno que pasa y nos pasa también.

Nos queda tratar de hacer vida algunos puntos de este autor... no parece muy difícil ni costoso.

Alto! La felicidad como actitud...

Hace un tiempo vi una reflexión titulada Alto. Reflexiones para reingeniería personal y me pareció interesante. Se plantea que la vida es lucha y que a veces hay que sobreponerse y reconstruirse.

Ahora vi un texto de la siempre brillante Victora Camps sobre la necesidad de ir descubriendo en la vida la ruta que puede llevar a lo que ella llama "vida buena".

Para esta autora la infelicidad es algo claro: renunciar al empeño de seguir adelante, de crecer, de tener ilusiones, de seguir en la lucha.

Ser feliz no es cosa de ratos. Es una búsqueda y ello implica esfuerzo, cierta lucha, perseverar, etc. Y todos son verbos que implican un poco de empeño.

Camps advierte que la filosofìa y en ella, la ética, se han empeñado en hacer ver que la ruta a la vida buena -más que solo a la "buena vida"- está marcada por un empeño diario por construirse, levantar una vida recta, convivir con la gente en paz, etc. Se trata pues, de ir construyendo el propio ethos... toda una labor para mucho tiempo pero que vale la pena.

El tema es... no tirar la toalla y reconstruirse, optar, saber no parar, como dice el primer texto que aquí citábamos.

Jóvenes, educación, límites

Hace pocos días apareció en el diario ABC español una nota en la que María J. Alava, psicóloga, hace una serie de reflexiones acerca de la educación de las nuevas generaciones.

Son reflexiones que el diario recoge del congreso de Fepace en torno al tema de la educación en este tiempo y en medio de la llamada sociedad líquida.

Alava hace ver que vivimos en un tiempo en que encontramos una nueva generación que vive un poco triste, insegura e insatisfecha.

La cuestión es por qué esto pasa.

La psicóloga, cuya opinión recoge ABC, hace ver que una de las razones es porque parece que es una generación que no es preparada para la vida, sobreprotegida y con dificultades para enfrentarse a la realidad con todo lo que ella implica.

La misma Alava da unas pistas para los padres.

Uno de esos tips es poner límites. Así como lo leen, amigos lectores. Los poco populares límites!!

Otro tip indicado por esta psicóloga en que nos fijamos consiste en plantear retos y permitir que los niños y los jóvenes pasen por la prueba de una posible frustración. Así aprenderán, posiblemente, que en esta vida "no todas son maduras".

Finalmente, Alava habla de una necesaria coordinación entre los padres, cuando del ambiente familiar se trata. Nunca contradecirse entre ellos y menos aún permitir de pronto lo que antes habían prohibido o limitado.

Con menos sobreprotección, normas claras y planteando retos que les lleven a hacer las cosas por ellos mismos, puede que -de repente- la consulta de los despachos de los psicólogos vean disminuir un poco el nuevo renglón de sus mejores clientes actuales, esto es, la franja de población entre 18 y 30 años.

Se puede leer aquí la nota de ABC

Toy Story

He tenido ocasión de mirar la última entrega de la saga Toy Story... me pareció un film bastante sugerente.

Independientemente de muchas cosas, hay en esta película una serie de fuertes temas que, sin salirse del todo de lo captable del público infantil, me da la impresión que lo rebasa.

Hay algunas ideas que se me sugirieron al mirar esta interesante y sentimentalmente fuerte película:

- hay momentos en la vida en los que hay que dar pasos, desprenderse, dejar atrás

- a veces hay que arriesgarse por los demás

- con frecuencia hay que seguir la voz interior, la conciencia

- integrar al que es diferente es todo un reto para  los que le rodean

- la belleza va más allá de las apariencias

- a veces hay que dar al otro incluso si ello duele

- el pasado está para ser superado aunque torture a veces

- perderse es encontrarse, sobre todo, si en temas de amor andamos

- ir "al infinito" a veces es solo un salto hacia uno mismo

Bien, ahi les dejo las ideas... si ven el film, me dicen si las ubican... Provecho!!

Religión

¡Vaya si no es una palabra fuertemente vilipendiada esta que aparece en nuestro título!!

Cuando ni se tiene idea clara de lo que implica la religión o el hecho religioso o no  se ha tenido una experiencia religiosa medianamente sana o sólo pensamos en los que no son consecuentes con su elección de vida en cuanto a la religión, corremos el riesgo de decir muchos despropósitos con respecto a esa realidad que llamamos hechos religiosos y que se plasman en grupos o instituciones con frecuencia.

Manuel Guerra en su Historia de las Religiones, publicado en Madrid por BAC dice: “Religión es el conjunto de creencias, celebraciones y normas ético-morales por medio de las cuales el ser intelectual reconoce, en clave simbólica, su vinculación con lo divino en la doble vertiente, a saber, la subjetiva y la objetivada o
exteriorizada mediante diversas formas sociales e individuales” (Guerra, 26)

Hay en toda religión creencias o cuerpo doctrinal, una serie de ritos o una liturgia, una propuesta de vida que implica un modo de vivir. No pueden faltar estos elementos. Otro asunto es cómo lo vivan los creyentes.

Por otra parte, toda religión se plasma en experiencias subjetivas y ellas se mezclan con otras comunitarias y hacen que las personas y ellas en medio de comunidades, vivan realidades como celebraciones, fiestas, sacrificios, oraciones diversas, etc. Esta definición deja claro que la religión no es un asunto a reservar en la vida privada de las gentes. Cada quien tiene el derecho de profesar y hacer ver lo cree, incluso, en público (el art 18 de la Declaración de DDHH de 1948 es claro al respecto).

La palabra "religión"  puede indicar observancia o ligarse a algo o bien elegir algo. Será diverso según "religare" sea un verbo leído por Cicerón, Lactancio o Agustín de Hipona.

En todo caso, vivir una religión teísta o solamente una ética con una lectura panteísta de la divinidad o de lo sagrado, es una experiencia que marca a quien la vive. Es una cosmovisión que no deja nada por fuera y que, vivida adecuadamente, permite una plenitud que llena la actitud religiosa humana y permite abrirse, cada uno a su manera, a la idea de salvación y felicidad plena.

¿Es justo o adecuado juzgar "en combo" todas las religiones o a las personas que las viven por el exceso de algunos o de alguna que otra autoridad? Me parece que no.

¿Puede o debe hablar de religión una persona que nunca ha vivido una experiencia religiosa madura y sana? Sospecho que tampoco.

Se impone hoy día una cuota mayor de seriedad a la hora de abordar este tema en medio de comunicación y en redes sociales. Por lo menos sería bueno informarse más y, si la persona que opina no desea introducirse en al teología pues al menos que abra un libro de filosofía de la religión o de fenomenología de las religiones o incluso, algo de historia o de historia comparada de las religiones. Como en todo. es muy inadecuado en este tema como en otros, hablar o escribir sin tener idea de lo que se opina o afirma.

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